Desde los inicios de la civilización humana el tema de la edad y la juventud ha sido de gran interés en casi todas las culturas. Hay muchas recetas naturales y conjuros para detener el paso del tiempo, así como pociones y ungüentos. En Alta magia se queman hierbas y objetos de reflejo al fuego directo mientras invoca a la deidad que se ocupa del tiempo y la sanación mediante un conjuro. Entre los rituales más sencillos, están los trabajos diarios no de carácter profesional e invocaciones a Diana Lucífera para consagrar el agua corriente y lograr conservar la juventud por largo tiempo, obtener la salud, entre otros beneficios.
Otros que se hacen mediante el reflejo del espejo, dos velas y un cepillo redondo en mano. Se ritualiza con el fin de tener un aspecto radiante cada día. Acá se trabaja con las entidades que viven en el espejo.
Otro elemento clave en los rituales de juventud es la miel, antiguamente los egipcios invocaban al Dios Min para la longevidad, la salud y la juventud eterna.
Entre los trabajos de carácter más profesionales y con un poco más de complejidad nos encontramos con las invocaciones nocturnas y tratos con la Diosa Lilith, en su máscara más apacible Innana/Ishtar. La cultura china tiene una deidad que está asociada a al té y la medicina herbal conocida como LU YU 陆羽, el dios del té. LU YU fue un personaje historico en la cultura china, nacido en el 733, durante la dinastía Tang. Fue abandonado por su familia debido a su fealdad, es así que fue encontrado a la orilla de un río por un monje budista que lo adoptó como su hijo. Con el tiempo LU YU aprende los secretos del té y las hierbas, domina el manejo de la energía y la medicina herbal. Fue tan dedicado y meticuloso su trabajo que logra equilibrar uso de hierbas y espiritismo. Consigue detener el tiempo mediante la invocación y comunicación con los dioses, con quienes pacta para ser favorecido con un don que le permita ser querido por la gente ya que por su falta de belleza vivía como un ermitaño. Los dioses le conceden el don de curar con el té primero en defumación y luego en infusión. A Lu Yu acudían de todas las naciones y poblados para ser sanados con sus maravillosas recetas, su conocimiento llega a nuestros días gracias al contacto de China con el mundo eslavo, ya que son todos países vecinos. Los brujos que practican la Alta Magia eslava conocen perfectamente estos secretos acerca del té y sus poderes curativos. Los brujos no aparentan la edad que tienen justamente porque muchos de ellos conocen estos saberes antiguos y además poseen una fuerza espiritual que se refleja en en su cuerpo astral. La edad es tema espiritual y no de riqueza material, la juventud la da la fuerza espiritual y la voluntad mental para que esto suceda. Un espíritu fuerte no es azotado por enfermedades y tristezas. Trabajar sobre la energía, el espíritu y la voluntad nos da juventud eterna, nos da la GNOSIS de los antiguos Dioses.
Espero les haya gustado
S'.'A'.'
Fuente: Sobre China/ Articulos.
Charlas esotéricas de Maestra Sofía Tkach y Maestra Inga Koshroeva.