LARVAS ASTRALES:

Las larvas astrales se forman con la acumulación muy grande de miasma, que son fluidos malignos y putrefactos. Un ambiente puede estar muy denso por la acumulación de energías negativas que van formando estos miasmas, desde donde nacen estas larvas espirituales. El cementerio es un caldo de cultivo de estos seres de tipo parásito energético.

Se alimentan de tu energía vital o cuerpo etérico, manipulando tu mente para que tengas ciertos antojos o vicios o caigas en ciertos traumas como trastornos energéticos o de personalidad, depresiones y o crisis en general.

Las larvas astrales tienen la capacidad de intensificar lo que ya está mal, por ejemplo, en una casa donde hay muchas peleas, una discusión simple, puede transformarse en un ambiente grave y violento.

No sólo pueden traer problemas de relación o espirituales, sino que también pueden afectar nuestro cuerpo físico, causándonos enfermedades o dolores en oídos, riñones, cuello, ingle, hombros, columna.

Pero hay que saber identificarlas, ya que algunas enfermedades pueden tener origen en estos parásitos astrales, pero otras pueden tener una procedencia distinta y ahí cabe un buen análisis profesional y el cuidado de la salud.

Si sientes algunas de estas características es conveniente poner más atención y ver si se tienen algunos de los siguientes síntomas:

Encuentras frecuentemente insectos en tu casa o en los ambientes donde te desenvuelves.

Por mucho que te esfuerces, te cuesta salir de situaciones difíciles.

Se te pierden las cosas con regularidad y te es muy difícil encontrarlas.

Tienes, ansiedad, miedos frecuentes, depresión, pesadillas frecuentes o sientes opresión.

Estás siempre cansado, con sueño y mucho estrés.

Tienes pensamientos recurrentes de manías, fobias, antojos insanos.

Sentimientos recurrentes de automutilación, de adicción a vicios o suicidio.

Si tienes varios de estos síntomas es posible que tengas larvas astrales, pero hay que hacer un análisis minucioso y en contexto, para descartar otras posibles patologías.

Sin embargo, las larvas astrales o parásitos energéticos, son seres de bajo nivel, como insectos que andan en cantidades, ellas se adhieren a tu aura, y se alimentan de tu energía, debilitándote y ocasionándote vicios.

FACTORES DE RIESGO PARA TENER ESTE TIPO DE PARÁSITOS ESPIRITUALES:

.Fallecimiento de un familiar o amigo. El dolor por una pérdida y el estrés que se genera hace que que bajen las defensas astrales.

.Abortos: El Phamton del niño no nacido queda como ocupa en el cuerpo de su madre hasta que puede encontrar la elevación hacia otros planos.

.Consumo de drogas: la persona dependiente no tiene voluntad ni defensas.

.Cirugías: un cuerpo abierto está expuesto a cualquier ataque espiritual.

.Gastos fuertes de energía: el profesional que se dedica a la Alta Magia o al chamanismo, atiende gran cantidad de consultantes sino se hace limpiezas cada tanto es afectado por las larvas que traen los consultantes.

. Cuando dormimos en astral también estamos expuestos, es ideal tener ciertos resguardos como hojas de abedul y atrapasueños para repeler los ataques de las larvas en los momentos de descanso donde somos vulnerables.

.Tocar objetos de otras personas cargados con energía negativa, como pueden ser cuarzos, metales, ropas, etc. Ocurre lo mismo cuando estamos cerca de gente muy tóxica, sucede lo mismo que con el contagio de piojos o pulgas.

QUITAR LARVAS ASTRALES:

Para quitarlas se debe recurrir a un profesional, se trabaja con el reflejo del consultante en el espejo, se hace un ritual para enterrar las larvas astrales mediante conjuros. Las larvas son seres del bajo astral que no soportan reflejarse y obedecen a la orden de los dioses oscuros, tampoco toleran a las personas de carácter firme porque lo que siempre eligen pegarse y consumir la energía de personas débiles y sin voluntad.

Fuente: Código Oculto.

Apuntes de charla esotérica de Maestra Sofía Tkach.